¿Por qué?

¿Por qué?

sábado, 16 de diciembre de 2017

La apatria chica

¿Por qué debe uno definirse en función de criterios geográficos? ¿Por qué tiene uno que definirse como catalán si nació en Cataluña? ¿Por qué tiene uno que sentirse español por haber nacido en España? ¿Por qué uno no puede no sentirse catalán o español o lo que sea? ¿Por qué uno no puede no sentirse nada, solo persona?


Con todo este asunto de Cataluña, no han sido pocas las personas que, conociendo mi patria chica, me han preguntado por mi opinión y por mis sentimientos al respecto. Yo les he contestado, por supuesto. Pero no es de eso de lo que quiero hablar en este último texto del blog. [Creo que dos años son más que suficientes para ‘El porquerón quincenario’; en realidad, la previsión inicial era que durara solo uno].

De lo que quiero hablar hoy es de esa identificación obligatoria, existente en todas partes, entre lugar de nacimiento y sentimiento de pertenencia (ya sea a un país, a una región, a un pueblo o a lo-que-sea). Supongo que ya sabes de qué hablo, pero, por si acaso, aquí te muestro algunos ejemplos: si naciste en España, eres español y tienes que sentirte español; si naciste en Ávila, eres abulense de por vida, aunque a los 7 años te hayan trasladado a Madrid y no hayas vuelto por Ávila más que unas pocas veces en cincuenta años; si naciste en Cataluña, eres catalán de por vida, aunque lleves viviendo fuera más tiempo que allí, y así sucesivamente.

Pues no. No es ese el planteamiento. Nacer en un sitio no implica que uno ‘sea’ de ese sitio ni que uno tenga que identificarse obligatoriamente con las demás personas que han nacido en ese mismo sitio. Vale, nadie puede olvidarse de lo que ha mamado: los paisajes, los rostros, las sensaciones, las vivencias… Pero eso es todo. No hay más.

Yo, cuando me preguntan de dónde soy, tengo una respuesta preparada: “soy catalán, de nacimiento; madrileño, de vecindad administrativa; español, de pasaporte, y apátrida, de convicción”.


¡Eso es to…, eso es todo, amigos!

¡Nos vemos por ahí!

No hay comentarios:

Publicar un comentario